Se hará necesario formar grupos de trabajo, los cuales estarán en diferentes sitios ayudando a la recolección de firmas, que es lo primero que se hace para solicitar algo al gobierno. Una vez recolectadas las firmas estas pasan a manos de las personas encargadas de conectar a la ciudadanía con los altos mandos del gobierno, para que ellos analicen y debatan la sugerencia pedida, en este caso el mayor repliegue y control por parte de las fuerzas armadas de nuestro país, para así evitar tanto accidente a causa del licor. Si la respuesta no es inmediata, podemos proceder a realizar marchas y protestas, obviamente sin formar conflictos, para que toda la comunidad se entere y apoye nuestra propuesta.
Las personas tienen que enterarse de una vez por todas que esto no es un juego y que se está hablando de la vida de seres humanos como todos nosotros. 1.198 personas murieron a causa de accidentes de tránsito y 500 sufren cada año lesión molecular a causa de los mismos, lastimosamente la mayoría de estos son jóvenes. Esta es la realidad, en bruto y sin adornos. Puede que parezcan simplemente cifras frías, anónimas y despersonalizadas; pero estamos seguros que detrás de cada número y de cada cifra hay alguien, una persona como tú, que antes de engrosar esas estadísticas también pensaba eso de: «Esas cosas les pasan a los demás, pero no a mí» o «Aunque beba yo controlo», «A mí el alcohol no me afecta para conducir». Alguien con todo un futuro por delante, una vida llena de sueños y de proyectos, ¿Tú crees que merece la pena correr el riesgo?
Si logramos que las autoridades de nuestro país nos apoyen, no queda más que pedirle a la comunidad su apoyo, que lo ganaremos realizando diversas conferencias, foros, visitas puerta a puerta informando como se realizara este trabajo, hasta lograr que la comunidad este de acuerdo con nosotros, y así formar la conciencia ciudadana y lograr que este gran problema sea erradicado de raíz, que cada uno de nosotros tome conciencia y poco a poco lograremos llegar a nuestro objetivo general que es bajar esos índices de accidentalidad que en estos momentos se encuentran por las nubes.
Las personas tienen que enterarse de una vez por todas que esto no es un juego y que se está hablando de la vida de seres humanos como todos nosotros. 1.198 personas murieron a causa de accidentes de tránsito y 500 sufren cada año lesión molecular a causa de los mismos, lastimosamente la mayoría de estos son jóvenes. Esta es la realidad, en bruto y sin adornos. Puede que parezcan simplemente cifras frías, anónimas y despersonalizadas; pero estamos seguros que detrás de cada número y de cada cifra hay alguien, una persona como tú, que antes de engrosar esas estadísticas también pensaba eso de: «Esas cosas les pasan a los demás, pero no a mí» o «Aunque beba yo controlo», «A mí el alcohol no me afecta para conducir». Alguien con todo un futuro por delante, una vida llena de sueños y de proyectos, ¿Tú crees que merece la pena correr el riesgo?
Si logramos que las autoridades de nuestro país nos apoyen, no queda más que pedirle a la comunidad su apoyo, que lo ganaremos realizando diversas conferencias, foros, visitas puerta a puerta informando como se realizara este trabajo, hasta lograr que la comunidad este de acuerdo con nosotros, y así formar la conciencia ciudadana y lograr que este gran problema sea erradicado de raíz, que cada uno de nosotros tome conciencia y poco a poco lograremos llegar a nuestro objetivo general que es bajar esos índices de accidentalidad que en estos momentos se encuentran por las nubes.
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